(I) Economía, conducta humana e incentivos (por Jan Doxrud)
El análisis económico estudia el modo en que los individuos “racionales” toman sus decisiones en condiciones de escasez y enfrentados a diferentes alternativas, y la forma en que estas decisiones afectan a otros agentes económicos. Se parte con la idea de que los individuos deciden de manera racional unas reglas de comportamiento, reglas como por ejemplo, maximizar su utilidad (teoría de la elección racional) , si se trata de consumidores, o maximizar sus beneficios, en el caso de los productores. Lo que el análisis económico estudia es cómo los agentes optimizan su conducta a la hora de enfrentarse a las alternativas posibles para alcanzar sus fines. Gary Becker (1930-2014), quien fue Profesor de Economía y Sociología en la Universidad de Chicago, fue uno los economistas que dedicó gran parte de su esfuerzo intelectual a la temática del análisis económico de la conducta humana. Becker obtuvo el Premio Nobel de Economía (1992) por “haber extendido al campo del análisis microeconómico nuevos dominios del comportamiento y de las relaciones humanas, incluso más allá de los límites del mercado”. Si bien no es el primero ni único (podemos citar a Daniel Kahneman, Vernon Smith o Richard Thaler).
Becker no se mostraba satisfecho con las definiciones clásicas de economía. Por ejemplo tenemos aquella definición que entiende la economía como el estudio de la distribución de bienes materiales para satisfacer necesidades humanas. Para Becker esta definición no explicaba qué hacen los economistas, en qué consiste el enfoque económico y, por lo demás, en el siglo XXI los trabajadores se ocupan cada vez menos en la producción de bienes tangibles, puesto que se concentran en el sector terciario de la economía. Además esta definición deja al margen ciertos ámbitos de la vida humana del “frío análisis económico”. En lo que respecta a la economía como estudio sobre la distribución de recursos escasos con fines alternativos y competitivos, Becker señala que, si bien es general e incluye variados ámbitos de la vida humana, no explica qué es el enfoque económico.
¿Qué propone Becker? El economista explicaba que lo que distingue a la economía de las demás disciplinas sociales no es su tema de estudio sino que su aproximación o enfoque. De acuerdo con Becker, en un seminario celebrado en 1977, el campo del análisis económico se extendía al conjunto de las conductas humana y de las decisiones correspondientes. A esto añadió que lo que definía a la economía no era el carácter mercantil o material de su objeto de estudio. Por último aseveró que toda cuestión que plantee un problema de asignación de recursos y de opciones en el marco de una situación de escasez caracterizada por el enfrentamiento de objetivos alternativos, entraba en el ámbito del análisis económico. Esta ampliación instrumental económico al análisis de otros campos de las ciencias sociales fue denominado (en un sentido no peyorativo) como el “imperialismo de la economía” por Gordon Tullock.
Un ejemplo de este enfoque amplio que propone Becker es el caso del matrimonio. De acuerdo con el enfoque económico, Becker señala lo siguiente:
1-Un individuo decide casarse cuando la utilidad prevista en el matrimonio excede la de permanecer soltero o la de seguir buscando un cónyuge más apropiado.
2-Análogamente, un individuo casado termina su matrimonio cuando la utilidad prevista por volver a ser soltero o de casarse con otra persona excede la pérdida de utilidad derivada de la separación.
En lo que respecta a los actos delictuales, Becker señalaba que estos no se explicaban por la irracionalidad, la enfermedad o el entorno social. Becker afirmaba que los delincuentes son actores racionales, que reaccionaban ante los INCENTIVOS(que abordaré posteriormente)como las demás personas. En cuanto a la reincidencia en lo delictivo, esto se explicaba por la reducción del horizonte temporal de los delincuentes, que, al igualque los drogadictos, estos vivían cada vez más en el presente y descontaban las consecuencias futuras.
Así, podemos apreciar que el enfoque económico comenzó a ampliarse para abordar ámbitos que en el pasado se consideraban al margen de este. En nuestros días esta “invasión de la economía” sobre ciertos ámbitos de la vida humana causa cierto rechazo. Por ejemplo, qué piensa el lector de las siguientes preguntas:
-¿Se debería pagar por tener amigos?
-¿Se debería pagar por donar sangre?
-¿Se debería pagar a las mujeres drogadictas para que se esterilicen?
-¿Se debería exigir un pago a quienes quieran migrar a un país?
-¿Se debería pagar a los alumnos por obtener buenas notas?
-¿Se debería pagar a los profesores por lograr buenos resultados académicos en sus alumnos?
¿Hasta qué punto los incentivos monetarios constituyen la panacea para solucionar toda clase de problemas? ¿Qué incentivos podría generar tales medidas? ¿Dinero por donar sangre u órganos? Pero esto podría tener como consecuencia la sustitución de un incentivo social por uno monetario que terminaría por distorsionar una acción que la persona la hace de manera desinteresada. Por lo demás podría suceder que las personas con escasos recursos o en apuros económicos comenzaran a donar órganos. Peor aún, que el crimen organizado comenzara a lucrar (aunque esto ya sucede) con el negocio de órganos. Podría suceder fraudes como por ejemplo “falsificar ”sangre humana por sangre de cerdo. ¿Pagar a alumnos por obtener buenas calificaciones? Aun si esto último funcionara, estaríamos condicionado desde pequeños a las personas a ser movidos por motivaciones extrínsecas y no intrínsecas (el gusto por hacer algo, la satisfacción que da, el sentirse realizado).
Tenemos el caso del fraude cometido por profesores en Estados Unidos (Atlanta) quienes manipulaban las notas de sus alumnos, para ser más precisos, aumentaban tales notas. Una profesora que actuó como testigo señaló literalmente que el fraude se produjo tanto tiempo que los profesores pasaron a considerarlo como parte de su trabajo. Una de las principales causa de este actuar por parte de los profesores fueron los incentivos económico, esto es , las pagas extra que se le dan a estos profesionales por los buenos resultados obtenidos por el buen rendimiento de la institución educativa. Otro caso que causó revuelo fue el pago por parte de una ONG (Project Prevention en California) a mujeres drogadictas para que se esterilizaran. O que tal arrendar un amigo tal como lo ofrece la empresa “Rent a friend”? (puede suceder que una persona no tenga habilidades sociales para hincar una amistad con personas, de manera que para suplir este “déficit” acude a un “mercado de amistades” para satisfacer su demanda por amistades).
Fin parte 1